
Estoy transitando entre estas dos posiciones, empiezo a escribir esta entrada porque quizá haya personas que estén en este transito interno, o en conversaciones relativas a esto, lo escribo porque en cierta medida me sirve para poder externalizar fuera estas dos sensaciones y poder conectarme mejor con la fluidez de transitar entre estas dos posiciones.
He de reconoceros que la semana pasada mi pareja estaba muy preocupada con la situación, decía que venía una situación difícil y no hice mucho caso, desde aquí decir que tenías razón, me viene ahora la necesidad de escuchar profundamente a las personas que están preocupadas por alguna cuestión, y dar la importancia que se merece a esta preocupación, aunque no sea la nuestra.
Hoy 13 de marzo, estoy en casa , he decidido, hemos decidido #QuedarnosEnCasa, organizando el teletrabajo como podemos, el cuidado de mi hijo también, las tareas de casa… y en esta planificación aparecen todas esas cosas que nunca tenemos tiempo para hacer: ordenar, pintar, jugar, decorar, plantar,… Estar en casa desde esta perspectiva es una situación nueva para nosotras e imagino para muchas personas, de repente acabo de pensar en las personas que su día a día es así, no salir de casa, no tener contacto con más personas, y me pregunto cómo estarán viviendo ellas esta situación, quizá se sientan afectadas por que no puedar recibir los cuidados necesarios. También pienso en las personas que ahora están en Hospitales, enfermas o cuidando de personas enfermesa, el año paso estuve en esta situación, que es muy compleja a muchos niveles e imagino que con esta situación y desborde tiene que ser más difícil. Tambien pienso en el personal sanitario, en su trabajo ahora, la dedicación, el esfuerzo, el amor con que lo hacen y les agradezco todo lo que hacen por el bien común.
Y aquí creo que es donde esta la cuestión, salir de lo que me pasa a mi, o cuál es el impacto que yo recibo en esta coyuntura y pensar en el común, en las demás personas, en las más vulnerables.
Me pregunto cómo podemos ayudarlas, cómo podemos tejer redes de solidaridad, cuidados, apoyo mutúo, desde el no contacto. Cómo escribe mi amiga Eva en la web de ExperimentaLAV «Solidaridad y creatividad sin tocarse».
Nos tocamos con el Alma, con esas redes invisibles que no necesitan ser físicas, en las que no puede posarse ningún virus. Para esto necesitamos salir del Shock inicial de este momento en el que nuestra cotidianidad, nuestro día a día, ya no va a poder ser cómo nos lo imaginabamos.
¿cómo salimos del shock?
La verdad es que no tengo respuestas sobre esto, os comparto algunas cosas que a mi me están ayudando:
- Ayer publique en las redes esta foto, hice público que aquí estoy por si alguna personas necesita ayuda, podemos hablar, compartir, ayudarnos mútuamente.

- Estaba pensando hacer una lista de qué posibilidad se abren ahora y mira por donde Miguel Brieva dibuja esto, que ha compartido mucha gente de mi entorno, con las que estoy muy de acuerdo
- Conectarme con mi ritmo vital, estar más concetadas conmigo misma. A nivel comunitario conectarnos con nuestros grupos de referencia, nuestras familias, saber de ellas, qué necesitan, cómo están.
- Dar espacio a las emociones que tenemos, a mi me ha ayudado a pensar en el miedo y quedarme en él durante un momento, explorar esta emoción en su profundidad, al hacer este trabajo me he podido conectar con lo que para mi es importante y que ahora mismo siento que está amenazado. Lo que es importante para mi: la salud de mis seres queridos y la mía propia; mi trabajo cotidiano, las interaciones que tengo con personas diversas en él; las redes tejidas de solidaridad, amistad y apoyo mútuo que hemos ido creando a lo largo de mi vida.
- Desde este lugar me he podido conectar con las posibilidades que ofrece este momento, que puedo sintetizar en el verbo parar, parar, parar. Parar en todos los sentidos, para cuidar, cuidarme y cuidar el planeta que tanto lo necesita.
- Estoy pensando en qué cosas puedo aprender en estos días: editar video con alguna aplicación, aprender más sobre trauma y recuerdos, aprender nuevas aplicaciones informáticas, afinar mi forma de hacer terapias online.. y muchas cosas más.
- Ayer hablé con mi amiga Natalia y pudimos compartir estos estados de animo, terminamos la conversación con creatividad: «podemos organizar una fiesta por zoom, que alguien se anime a pinchar música y bailamos, nos tomamos algo, compartimos un rato, si queremos hablar con alguien particular, podemos hacerlos por otra aplicación por skype, o por teléfono…» Me encantó conectarme con este momento, que quizá podamos hacer en unas semanas.
En estos días seguiré escribiendo, en los momentos en lo que tenga tiempo, para compartir con todas vosotras reflexiones que puedan ser útiles en este momento de incertidumbre.
#QuedarosEnCasa